Habla una antigua leyenda de un astro en el cielo que no quiso ser visto por el Sol, un astro misterioso y cíclico, un astro con el cual millones de mujeres han contado sus ciclos desde que el tiempo iba en pañales. Si, es la Luna.
La Luna me atraía desde pequeño, ya en brazos de mi madre la miraba salir y esconderse entre las cornisas de los bloques de pisos, siempre ansisaba la llegada de aquella extraña esfera clara en el inmenso cielo negro. Empecé a hablar pronto y cada día aprendía palabras que no tenía mucha idea de lo que querían decir, no se.. palabras ya muertas como zaire, yugoslavia, checoslovaquia o mi favorita de aquellos lejanos 80, urss (no entendía que eran solo repetía obsesivo lo que soltaban los telediarios). Hasta que un día deje de repetir para hacer frases y de noche paseando en brazos de mi madre pregunté, mama que es eso que siempre se esconde y vuelve a salir? mi madre incrédula dijo, el Sol? y yo enojado con ese mal genio de quien no se sabe entendido dijo, no! eso que es blanco y con manchas que se pasea por el cielo? y mi madre con su habitual gracia malagueña soltó una mueca y dijo, la Luna niño, la Luna.
Luna, una palabra que retumbó en mi cabeza para siempre, pero porque miraba la Luna obsesibamente un crio de 3 años? no os puedo explicar el porqus, hace 20 años y las razones podrían ser muy pueriles, quizás era su belleza, quizás porque se encondía tras las cornisas y volvía a salir... quien sabe, solo se que me enamoré de esa cosa que colgaba del cielo. Entre olacas con el nombre de las calles y libros prestados aprendí a leer mucho antes de empezar p-5; en mi epoca no existian ni p-4 ni p-3, y por mas que buscaba esa palabra, no la encontra, porque por todos lados había soles y no había lunas? frases como, el sol salió entre las montañas, el sol brilló entre las nubes... si eran bonitas para un niño de 4 años, pero yo quería una Luna!
Por fin llego mi primer día de colegio, aunque mi retraida forma de ser no me hizo ningun bien, de hay en adelante solo hubo una escalada hacía el vacío, pero eso otro día os lo contaré. Letra a letra hilaba frases y por fin aprendi a decir, me gusta la Luna; aunque por aquel entonces mi frase favorita era la Luna es chula!, de ese modo escribí mi primeras palabras torcidas en un folio cuadriculado. Extraño y encantandor mundo ese que se abrió bajo mis narices aun sin gafas, podía dibujar y escribir cosas sobre la Luna!
Ya en primero de primária, mi curiosidad exarcebada me llevó a la biblioteca de mi pueblo, guardián de todo lo que se y dueño de todos los recuerdos infantiles buenos; los malos los repartí a diestro y siniestro... un libro llamado "el universo sin secretos", uno de esos libros con ruedecitas de los de, ahora es de día, y ahora es de noche, entonces asistí a algo atónito y que no me podía imaginar. Primero, la tierra es redonda, al igual que la Luna y Sol, segundo, la Tierra gira entorno al sol, y no al revés como mi pueril mente pensaba, y terecero, mi adorada Luna giraba cada veintiocho dias sobre la tierra, veintiocho dias? me pregunté, y con esa tonta manía de preguntarme para responderme caí en ello, ah si es casi un mes! Facil, doce lunes eran un año (no exactamente vaya...) asi que luna llena tras luna llena fui contando la vida en lunas, cosa que luego descubrí que los indios hacen eso mismo.
Ya sabida la realidad de aquel satélite me autoconbencí de que la Luna no estaba tan lejos y que si le hablaba me escucharía, no? Noche tras noche de luna llena me asomaba disimuladamente al balncón, y en voz bajita le pregunta: luna lunera, porque siempre brillas y estás tan llena? (la rima nació conmigo como podeis ver) cerraba los ojos, sonreía y por un momento soñaba que a la luna pudiera viajar para ver la Tierra desde sus ojos. Esta costumbre se fue entremezclando con mis penas mas amargas y mis anhelos mas oscuros, si la Luna hablara... ya teniendo 9 años, con mis padres divorciados, y yo cursando en otro colegio, empezé a mirar la Luna sin esa bondad infantil, seguía siendo hermosa, pero mi vida no lo era, asi que empecé a mirarle con lejanía, durante los 8 años siguientes la Luna a sido un imposible mudo e inerte, pero al empezar a perder vista sin explicación médica volví a alzar mis ojos al cielo y a preguntarle el porque a la Luna.
Luna lunera, porque de día no veo y de noche tu cara veo a la primera? No entendía que me pasaba, yo creía que era miope, dicho por todos los médicos, pero algo raro estaba pasando, cada día veía menos y pronto empezaron los tropezones, los accidentes domésticos y la pregunta del millón, pero ves bien? respuesta obvia la mía, no, claro que no! Durante unos meses de aquel 2005 no supe bien que hacer, si decirles a todos que me estaba pasando y o hacer como siempre, callar tragar y asumir. Hasta que un día fui a la S.Social y me abrió los ojos, encharcando de lágrimas los de mis seres queridos, aquel doctor iraní con un acento peculiar enmudeció, se quedo blanco y llamo a mi madre a la otra sala. Evidentemente para quel entonces mi oido ya era felino, y escuché con espanto esta frase: ve usted el color de este ojo? mi madre sin saber si era bueno o malo dijo, si, es anaranjado, no? a lo que el doctor sin mas le dijo, tendría que ser rojo, rojo sangre y este chico no tiene apenas flujo sanguineo en la retina.
No tenía que ser pasteur para saber que eso no era bueno asi que me pregunté a mi mismo, esto es una buena o una mala noticia? Por desgrácia mi madre lo tomó fatal, no puedo hacerme cargo de que siente una madre cuando le dicen tal noticia, lo admito, pero ni mucho menos yo me lo tomé tan mal, rápido asumí que como os conté antes, tenía que evolucionar, como dijo Darwin. Lo primero fue agudizar mis sentidos, algo que se hace solo, no influi en nada, pero en lo que si fui actor fue en mi apertura al mundo, ya había intentado muchas veces ser mas abierto, hablador y deslenguado, total nadie me escuchaba, no podía decir nada malo.
La primera cita, el primer beso, el primer te quiero, son cosas que para mi fueron una avalancha de cosas que jamás había vivido antes, a mis 17 años supe que ese era mi camino, pues mas vale morir de amor que vivir de soledad. Mi manera de ser tiene riesgos, muchos riesgos, se me daña facilmente, me ilusiono y caigo con la misma facilidad y hablo demasiado, quizás por efecto de un silencio tan prolongado. Aun asi el Miguel autentico salió de entre las sombras, y alzando la vista una noche le preguntó a la Luna: Luna lunera, porque mientras menos veo mas claro lo veo todo?
Mas cierto que la Tierra gira, mas cierto que la lluvia moja, es que desde aquel entonces solo he tenido un objetivo, acercarme mas a la Luna porque con su luz todo se ve mas claro, y hacer que de esa luz brillen todos mis seres queridos, y como no, TÚ!
Los golpes de la vida son comunes, pero la manera de afrontarlos es infinita, yo decidí no tomarme la vida en serio, porque recordad, no saldremos vivos de ella. Asi que repito, rie, llora, ama y odia. Grita, salta, siente, besame y toca. Porque todo lo que se escapa entre nuestros dedos en un día menos que vivimos, y yo quiero vivir mas que nadie, y si es contigo, mucho mejor. Gracias!
La Luna me atraía desde pequeño, ya en brazos de mi madre la miraba salir y esconderse entre las cornisas de los bloques de pisos, siempre ansisaba la llegada de aquella extraña esfera clara en el inmenso cielo negro. Empecé a hablar pronto y cada día aprendía palabras que no tenía mucha idea de lo que querían decir, no se.. palabras ya muertas como zaire, yugoslavia, checoslovaquia o mi favorita de aquellos lejanos 80, urss (no entendía que eran solo repetía obsesivo lo que soltaban los telediarios). Hasta que un día deje de repetir para hacer frases y de noche paseando en brazos de mi madre pregunté, mama que es eso que siempre se esconde y vuelve a salir? mi madre incrédula dijo, el Sol? y yo enojado con ese mal genio de quien no se sabe entendido dijo, no! eso que es blanco y con manchas que se pasea por el cielo? y mi madre con su habitual gracia malagueña soltó una mueca y dijo, la Luna niño, la Luna.
Luna, una palabra que retumbó en mi cabeza para siempre, pero porque miraba la Luna obsesibamente un crio de 3 años? no os puedo explicar el porqus, hace 20 años y las razones podrían ser muy pueriles, quizás era su belleza, quizás porque se encondía tras las cornisas y volvía a salir... quien sabe, solo se que me enamoré de esa cosa que colgaba del cielo. Entre olacas con el nombre de las calles y libros prestados aprendí a leer mucho antes de empezar p-5; en mi epoca no existian ni p-4 ni p-3, y por mas que buscaba esa palabra, no la encontra, porque por todos lados había soles y no había lunas? frases como, el sol salió entre las montañas, el sol brilló entre las nubes... si eran bonitas para un niño de 4 años, pero yo quería una Luna!
Por fin llego mi primer día de colegio, aunque mi retraida forma de ser no me hizo ningun bien, de hay en adelante solo hubo una escalada hacía el vacío, pero eso otro día os lo contaré. Letra a letra hilaba frases y por fin aprendi a decir, me gusta la Luna; aunque por aquel entonces mi frase favorita era la Luna es chula!, de ese modo escribí mi primeras palabras torcidas en un folio cuadriculado. Extraño y encantandor mundo ese que se abrió bajo mis narices aun sin gafas, podía dibujar y escribir cosas sobre la Luna!
Ya en primero de primária, mi curiosidad exarcebada me llevó a la biblioteca de mi pueblo, guardián de todo lo que se y dueño de todos los recuerdos infantiles buenos; los malos los repartí a diestro y siniestro... un libro llamado "el universo sin secretos", uno de esos libros con ruedecitas de los de, ahora es de día, y ahora es de noche, entonces asistí a algo atónito y que no me podía imaginar. Primero, la tierra es redonda, al igual que la Luna y Sol, segundo, la Tierra gira entorno al sol, y no al revés como mi pueril mente pensaba, y terecero, mi adorada Luna giraba cada veintiocho dias sobre la tierra, veintiocho dias? me pregunté, y con esa tonta manía de preguntarme para responderme caí en ello, ah si es casi un mes! Facil, doce lunes eran un año (no exactamente vaya...) asi que luna llena tras luna llena fui contando la vida en lunas, cosa que luego descubrí que los indios hacen eso mismo.
Ya sabida la realidad de aquel satélite me autoconbencí de que la Luna no estaba tan lejos y que si le hablaba me escucharía, no? Noche tras noche de luna llena me asomaba disimuladamente al balncón, y en voz bajita le pregunta: luna lunera, porque siempre brillas y estás tan llena? (la rima nació conmigo como podeis ver) cerraba los ojos, sonreía y por un momento soñaba que a la luna pudiera viajar para ver la Tierra desde sus ojos. Esta costumbre se fue entremezclando con mis penas mas amargas y mis anhelos mas oscuros, si la Luna hablara... ya teniendo 9 años, con mis padres divorciados, y yo cursando en otro colegio, empezé a mirar la Luna sin esa bondad infantil, seguía siendo hermosa, pero mi vida no lo era, asi que empecé a mirarle con lejanía, durante los 8 años siguientes la Luna a sido un imposible mudo e inerte, pero al empezar a perder vista sin explicación médica volví a alzar mis ojos al cielo y a preguntarle el porque a la Luna.
Luna lunera, porque de día no veo y de noche tu cara veo a la primera? No entendía que me pasaba, yo creía que era miope, dicho por todos los médicos, pero algo raro estaba pasando, cada día veía menos y pronto empezaron los tropezones, los accidentes domésticos y la pregunta del millón, pero ves bien? respuesta obvia la mía, no, claro que no! Durante unos meses de aquel 2005 no supe bien que hacer, si decirles a todos que me estaba pasando y o hacer como siempre, callar tragar y asumir. Hasta que un día fui a la S.Social y me abrió los ojos, encharcando de lágrimas los de mis seres queridos, aquel doctor iraní con un acento peculiar enmudeció, se quedo blanco y llamo a mi madre a la otra sala. Evidentemente para quel entonces mi oido ya era felino, y escuché con espanto esta frase: ve usted el color de este ojo? mi madre sin saber si era bueno o malo dijo, si, es anaranjado, no? a lo que el doctor sin mas le dijo, tendría que ser rojo, rojo sangre y este chico no tiene apenas flujo sanguineo en la retina.
No tenía que ser pasteur para saber que eso no era bueno asi que me pregunté a mi mismo, esto es una buena o una mala noticia? Por desgrácia mi madre lo tomó fatal, no puedo hacerme cargo de que siente una madre cuando le dicen tal noticia, lo admito, pero ni mucho menos yo me lo tomé tan mal, rápido asumí que como os conté antes, tenía que evolucionar, como dijo Darwin. Lo primero fue agudizar mis sentidos, algo que se hace solo, no influi en nada, pero en lo que si fui actor fue en mi apertura al mundo, ya había intentado muchas veces ser mas abierto, hablador y deslenguado, total nadie me escuchaba, no podía decir nada malo.
La primera cita, el primer beso, el primer te quiero, son cosas que para mi fueron una avalancha de cosas que jamás había vivido antes, a mis 17 años supe que ese era mi camino, pues mas vale morir de amor que vivir de soledad. Mi manera de ser tiene riesgos, muchos riesgos, se me daña facilmente, me ilusiono y caigo con la misma facilidad y hablo demasiado, quizás por efecto de un silencio tan prolongado. Aun asi el Miguel autentico salió de entre las sombras, y alzando la vista una noche le preguntó a la Luna: Luna lunera, porque mientras menos veo mas claro lo veo todo?
Mas cierto que la Tierra gira, mas cierto que la lluvia moja, es que desde aquel entonces solo he tenido un objetivo, acercarme mas a la Luna porque con su luz todo se ve mas claro, y hacer que de esa luz brillen todos mis seres queridos, y como no, TÚ!
Los golpes de la vida son comunes, pero la manera de afrontarlos es infinita, yo decidí no tomarme la vida en serio, porque recordad, no saldremos vivos de ella. Asi que repito, rie, llora, ama y odia. Grita, salta, siente, besame y toca. Porque todo lo que se escapa entre nuestros dedos en un día menos que vivimos, y yo quiero vivir mas que nadie, y si es contigo, mucho mejor. Gracias!
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