martes, 11 de mayo de 2010

cegado de amor

Cegado de pasión, como en tantas otras ocasiones, cegado por lo que sentia, y con algo tatuado en la boca, contento. Que raro es estarlo, que dificil sentirlo, y que facil confundirlo con la felicidad cuando lo explicas sin vivirlo.

Como en tantas otras ocasiones iba por la calle contento, ajeno a todo lo que se cernía sobre mi, las nubes eran blancas, el sol brillaba y calentaba con fuerza, y la gente parecia estar de buen humor, en fin, que bonito es todo cuando en tu pecho resuena amor.

No importa cuando tardes, no importa la hora a la que vengas, ven, porque mi tren siempre es de ia y a veces olvido que hay el mismo camino de mi a ti, que de ti a mi, y con un solo saludo, a tus pies me rendiré, porque con poco soy feliz, y con esa fuerza, todo lo lograré.

Día a día vas notando como tu pareja se apaga, ya no te saluda, ya no viene en cuanto tiene una hora, ya no sientes ese fuego en sus labios cuando os besais, y es amargo cuando despiertas y reconoces, estaba cegado de pasión.

Dicen que el tiempo todo lo cura, pero dudo que sin poner de tu parte sane nada de lo que sentiste, debes sufrir, digerir que solo tu amaste, y que en vez de revelarte diste mas amor, pero un día todo acaba, y te sientes vacio, decepcionado, sin razón.

Volver a amar de entrada se antojó imposible, pero nada lo es en este mundo, lo mas sencillo abre una puerta, la brisa airea tu dolor, y cuando te quieres dar cuenta, ya vuelves a creer en el amor, solo necesitas dos cosas, confianza, y buena vista, para no estar cegado de pasión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario